miércoles, 10 de junio de 2009

Las Rocosas canadienses

Situadas a lo largo de la frontera entre Alberta y la Columbia Británica, las Rocosas (o Rocallosas) Canadienses están situadas dentro de dos parques nacionales muy grandes: el Banff, al sur, y el Jasper, al norte. El Parque Nacional Banff fue el primer santuario oficial de la vida salvaje en Canadá, y hoy en día la ciudad que le dio nombre se ha convertido en el primer centro turístico del país, tanto en verano como en invierno, aunque el Parque Nacional Jasper sea más extenso e inexplorado.
El magnífico lago Moraine, de aguas azul turquesa, se encuentra en el Parque Nacional Banff. A pesar del peligro de convertirse en una de las imágenes más explotadas del país, no deja de ser una de las más bellas atracciones naturales de Canadá. Los parques Banff y Jasper comparten el Columbia Icefield, un gran bloque de hielo del período glaciar, formado por unos treinta de glaciares, como el glaciar Athabasca. Esta zona ofrece otras opciones, como pasear a través del parque natural, bañarse, visitar cuevas, ir de acampada, hacer excursiones, descender en canoa, bañarse en fuentes de agua caliente o escalar montañas. Las Montañas Rocosas, quintaesencia de Canadá, ofrecen también multitud de lugares para alojarse a precios que, generalmente, son más bajos en los lindes del parque Jasper.
Las precipitaciones que recibe son de forma moderada, lo que lleva a concluir que los ríos son de un caudal irregular. Su población es muy escasa y el número de ciudades es realmente muy pobre. Entre sus principales actividades económicas se encuentra la maderera y la obtención de minerales como oro, plata, molibdeno, petróleo, gas o zinc. Su vegetación se caracteriza principalmente por la presencia de las coníferas. Su montaña más alta es el Monte McKinley.